El abuso de drogas en la adolescencia puede tener una gran repercusión en la vida de
tu hijo. Averigua cómo ayudar a tu hijo adolescente a tomar decisiones saludables y evitar el consumo de drogas.
El cerebro adolescente está en proceso de maduración. En general, está más centrado en recompensas y en asumir riesgos que el cerebro de un adulto. Al mismo tiempo, los adolescentes presionan a los padres para que les den más libertad cuando empiezan a explorar su personalidad.
Los adolescentes que experimentan con drogas y otras sustancias adictivas ponen en peligro su salud y su seguridad. El cerebro de los adolescentes es especialmente vulnerable a presentar cambios debidos a las sustancias adictivas que sobrecargan los circuitos de recompensa.
Para ayudar a prevenir el abuso de drogas durante la adolescencia, habla con tu hijo adolescente sobre las consecuencias de consumirlas y la importancia de tomar decisiones saludables.
Estos son algunos factores de riesgo comunes para el abuso de sustancias adictivas en los adolescentes:
- Antecedentes familiares de abuso de sustancias.
- Una afección mental o de comportamiento, como depresión, ansiedad o trastorno por déficit de atención e hiperactividad.
- Comportamiento impulsivo o riesgoso.
- Antecedentes de eventos traumáticos, como haber tenido o haber visto un accidente automovilístico, o haber sido víctima de abuso.
- Baja autoestima o sentimientos de rechazo social.
- El alcohol y la nicotina o el tabaco pueden ser algunas de las primeras sustancias adictivas más accesibles para los adolescentes. Debido a que el alcohol y la nicotina o el tabaco son legales para los adultos, puede parecer que probar estas sustancias no es tan dañino, aunque no son seguras para los adolescentes.
En general, los adolescentes desean sentirse aceptados por sus pares. Por eso, si un amigo consume sustancias adictivas, tu hijo adolescente podría sentir que él también necesita hacerlo. Los adolescentes también consumen sustancias adictivas para sentirse más seguros con sus pares.
También podrían probar estas sustancias adictivas porque sienten curiosidad, o como un modo de rebelarse y desafiar las reglas de la familia.
Algunos adolescentes pueden sentir que no les ocurrirá nada malo y, tal vez, no entienden las consecuencias de sus acciones.
Consecuencias del abuso de drogas en adolescentes:
- Drogodependencia. Algunos adolescentes que abusan de drogas corren más riesgo de desarrollar un trastorno por consumo de sustancias.
- Falta de criterio. El consumo de drogas en la adolescencia se asocia con la falta de criterio en las interacciones sociales y personales.
- Actividad sexual. El consumo de drogas se asocia a la actividad sexual de alto riesgo, las relaciones sexuales sin protección y el embarazo no planeado.
- Trastornos de salud mental. El consumo de drogas puede agravar los trastornos de salud mental, como la depresión y la ansiedad, o aumentar el riesgo de desarrollarlos.
- Conducir bajo los efectos de las drogas. El efecto de las drogas afecta la capacidad para conducir y pone en peligro al conductor, a los pasajeros y a otras personas en la carretera.
Los efectos de las drogas en la salud
Las sustancias adictivas que los adolescentes pueden consumir incluyen aquellas que son legales para los adultos, como el alcohol o el cigarrillo. También podrían usar medicamentos recetados para otras personas, como los opioides, o bien, pedir por Internet alguna sustancia adictiva destinada a mejorar el rendimiento deportivo o promover la pérdida de peso. En algunos casos, se recurre a la inhalación de productos domésticos habituales que contienen determinadas sustancias químicas a fin de drogarse.
Además, los adolescentes también pueden consumir drogas, como la cocaína o la metanfetamina.
El consumo de estas drogas puede llevar a drogadicción, deterioro grave, enfermedades y muerte. Los riesgos para la salud de las drogas de consumo frecuente incluyen los siguientes:
- Cocaína. Riesgo de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular y convulsiones.
- Éxtasis. Riesgo de insuficiencia hepática e insuficiencia cardíaca.
- Sustancias inhalables. Riesgo de daño al corazón, los pulmones, el hígado y los riñones después de un consumo prolongado.
- Marihuana. Riesgo de deterioro de la memoria, del aprendizaje, de la capacidad de resolver problemas y de la concentración; riesgo de psicosis, como esquizofrenia, alucinaciones o paranoia, más adelante en la vida y relacionado con el consumo temprano y frecuente. En el caso de los adolescentes que consumen marihuana y tienen un trastorno psiquiátrico, existe un riesgo de depresión y un mayor riesgo de suicidio.
- Metanfetaminas. Riesgo de conductas psicóticas por el consumo prolongado en dosis elevadas.
- Opioides. Riesgo de dificultad respiratoria o muerte por sobredosis.
Cómo hablar sobre el consumo de drogas entre los adolescentes
Si estás comenzando una conversación sobre el consumo de sustancias adictivas, elige un lugar donde tu hijo y tú se sientan cómodos, y elige un momento en que sea menos probable que te interrumpan. También es importante saber en qué momento no es conveniente tener una conversación. Si los padres están enojados o si los adolescentes se sienten frustrados, es mejor dejar la conversación para otro momento. Si no están preparados para responder preguntas, los padres pueden decirles a sus hijos que hablarán sobre el tema otro día.
Para hablar con tu hijo adolescente sobre las drogas, haz lo siguiente:
- Pregúntale a tu hijo cuál es su opinión. Evita los sermones. En su lugar, escucha las opiniones y preguntas de tu hijo adolescente sobre las drogas. Los padres pueden tranquilizar a sus hijos adolescentes asegurándoles que no se meterán en problemas por ser sinceros y tener esta conversación.
- Explica las razones por las que no se deben consumir drogas. Evita las tácticas de intimidación. Enfatiza cómo el uso de drogas puede afectar las cosas que son importantes para tu hijo adolescente. Algunos ejemplos pueden ser el rendimiento deportivo, conducir un automóvil, la salud o la apariencia.
- Considera los mensajes de los medios de comunicación. Los medios de comunicación social, los programas de televisión, las películas y las canciones pueden mostrar el consumo de drogas como algo normal o atractivo. Hablen sobre lo que tu hijo adolescente ve y oye.
- Hablen sobre las maneras de resistir la presión de grupo. Intercambien ideas sobre cómo rechazar las ofertas de drogas.
- Prepárate para hablar sobre tu propio consumo de drogas. Piensa en cómo responderás si tu hijo adolescente te pregunta sobre tu consumo de sustancias adictivas, incluido el alcohol.
- Si elegiste no consumir, explícale por qué. Si consumiste, cuéntale lo que te enseñó la experiencia.
Otras estrategias de prevención
Considera otras estrategias para prevenir el abuso de drogas entre los adolescentes:
- Conoce las actividades de tu hijo. Presta atención a dónde se encuentra tu hijo adolescente. Averigua qué actividades supervisadas por adultos le interesan a tu hijo adolescente y anímalo a participar en ellas.
- Establece reglas y consecuencias. Explica las reglas familiares, tales como salir de una fiesta en la que se consumen drogas y no subirse a un automóvil cuyo conductor las consumió.
- Trabaja con tu hijo adolescente para elaborar un plan que le permita llegar a casa sano y salvo si la persona que conduce está consumiendo sustancias adictivas. Si tu hijo adolescente rompe las reglas, aplica siempre las consecuencias.
- Conoce a los amigos de tu hijo. Si los amigos de tu hijo adolescente consumen drogas, es posible que también se sienta presionado para experimentar.
- Bríndale apoyo. Felicita y alienta a tu hijo cuando tenga éxito. Un vínculo fuerte entre tú y tu hijo adolescente podría ayudar a prevenir que consuma drogas.
Presta atención a posibles señales de alerta, como las siguientes:
- Cambios repentinos o drásticos en las amistades, los hábitos alimenticios, los patrones de sueño, la apariencia física, los pedidos de dinero, la coordinación o el desempeño escolar.
- Comportamiento irresponsable, falta de criterio y falta de interés general.
- Romper las reglas o distanciarse de la familia.
- La presencia de envases de medicamentos (sin haber una enfermedad) o parafernalia de drogas ilícitas en la habitación de tu hijo adolescente.
Busca ayuda para el abuso de drogas en adolescentes si sospechas o sabes que tu hijo adolescente está probando o consumiendo sustancias adictivas:
- Planifica tus acciones. Averiguar o sospechar que tu hijo adolescente consume sustancias adictivas puede generarte emociones fuertes. Antes de hablar con él, asegúrate de que tanto tú como sus demás cuidadores estén listos.
- Puede ser útil que la conversación tenga un objetivo y que decidas cómo responderás a las diferentes maneras en las que podría reaccionar tu hijo adolescente.
- Habla con tu hijo. Nunca es demasiado pronto para intervenir. El uso ocasional de sustancias adictivas puede convertirse en uso excesivo o adicción, y esto puede derivar en accidentes, problemas legales y problemas de salud.
- Alienta la honestidad. Mantén la calma y explícale que deseas hablar de este tema con él porque te preocupa. Comparte detalles específicos que respalden tus sospechas. Verifica todo lo que te diga tu hijo.
- Concéntrate en el comportamiento, no en la persona. Enfatiza que el consumo de sustancias adictivas es peligroso, pero que eso no significa que sea una mala persona.
- Mantén un contacto regular. Pasa más tiempo con tu hijo adolescente. Averigua a dónde va y hazle preguntas sobre sus salidas cuando regrese a casa.
- Busca ayuda profesional.
NO DUDES DE LLAMAR a la Línea 141, en forma gratuita anónima y en todo el país: un servicio de contención para personas con problemas de consumo en situación de aislamiento